¿Alguna vez has visto una película tan mala que te hizo reír de principio a fin? ¿Una que parece tan absurda que desafía cualquier lógica? Hoy vamos a sumergirnos en una de esas joyas del cine de ciencia ficción de los años 50: con una historia delirante, llena de gorilas espaciales, dinosaurios, amores imposibles y… una máquina de burbujas. Es uno de esos largometrajes que, a pesar de su pésima calidad, ha logrado un lugar en la historia del cine, principalmente por su desmedido encanto “tan mala que es buena”.
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LA TRAMA DE ROBOT MONSTER
Nuestro protagonista, el pequeño Johnny, se sumerge en una serie de aventuras que nos llevan a explorar este mundo extraño y violento. Con él está su hermana Carla, su madre y Alice, una joven científica que no tarda en despertar el interés romántico del monstruoso alienígena. Desde cuevas misteriosas hasta encuentros extraños con dinosaurios y caimanes, la trama oscila entre lo absurdo y lo surrealista. Johnny presencia escenas de burbujas, rayos y enfrentamientos entre dinosaurios, hasta que un sueño parece poner fin a este caótico espectáculo… ¿o quizá no?
ANÁLISIS PSICOLÓGICO Y CONTEXTO DE LA ÉPOCA
Para entender la magnitud del fracaso y la extravagancia de “Robot Monster”, debemos contextualizarla en la década de 1950, cuando la ciencia ficción se centraba en el miedo a la invasión y a la Guerra Fría. Esta película intenta, sin mucho éxito, jugar con esos temores, personificándolos en una criatura torpe, “Ro-Man”, quien encarna una amenaza a la humanidad con una torpeza que es tan hilarante como irónica.
La película refleja el temor humano a perder el control sobre nuestro destino. La contradicción entre la misión letal del “gorila extraterrestre” y su atracción inexplicable por Alice sugiere una especie de lucha interna… aunque en el fondo sabemos que estas emociones solo están ahí para añadir un toque melodramático que, al final, solo aumenta el nivel de absurdo.
CONFLICTOS INTERNOS DE LOS PROTAGONISTAS
En cuanto a los personajes, el conflicto central reside en el propio “Ro-Man”, quien intenta cumplir su misión de destruir a los últimos humanos, pero se encuentra atrapado entre su deber y su deseo de acercarse a Alice, la hija del científico. Este conflicto es el que guía las acciones del alienígena, quien en un momento llega incluso a cuestionarse a sí mismo: “Ser como los humanos. Reír, sentir, querer. ¿Por qué estas cosas no están en el plan?”.
LA NATURALEZA COMO ESCENARIO
A pesar de sus limitaciones, “Robot Monster” cuenta con algo especial en su ambientación. Toda la película fue filmada al aire libre, en el icónico Cañón Bronson en los Ángeles, y su director, logró aprovechar estas formaciones rocosas y cuevas para ambientar de forma minimalista el planeta Tierra destruido.
La película explota un escenario natural limitado, pero muy efectivo. Con pocos recursos, logró que las cuevas y colinas se transformaran en refugios de los personajes y en la guarida del temible “Ro-Man”. Sin embargo, los insertos de dinosaurios y otros animales de archivo en la naturaleza tienden a desconcertar, ya que los animales parecen estar insertados sin mucha coherencia.
LO QUE FUNCIONÓ Y LO QUE NO
La película tiene elementos que, aunque torpes, generaron cierta “magia accidental”. La máquina de burbujas, que se promocionó en los créditos como “la máquina de burbujas de mil millones” es un ejemplo de cómo un elemento barato y absurdo se volvió icónico.
Sin embargo, en cuanto a sus fallas… hay mucho para elegir. Los diálogos no tienen sentido en su mayoría, y el diseño del alienígena “Ro-Man”, a medio camino entre un gorila y un buzo, apenas resulta intimidante.
A esto se suma la inconsistencia total en la narrativa, cómo, por ejemplo, si “Ro-Man” puede detectar a todos los humanos que quedan en la Tierra, ¿cómo es que no puede detectar al protagonista, cuando se esconde en su cueva a solo unos metros de distancia? Lo más patético es la falta de expresividad del pobre invasor, quien se limita a agitar su puño para mostrar su frustración.
“Robot Monster” plagio imágenes de otros clásicos icónicos del género de ciencia ficción, cómo por ejemplo: “One Million B.C.” (1940); “Rocketship XM” 1950; “Lost Continent” (1951); “Vuelo a Marte” (1951); “Captive Women” (1952); “Invaders from Mars” (1953); con todo este material de archivo el director la rodó en cuatro días: Tras las críticas que fueron espantosas (y la imposibilidad de recuperar la inversión económica que había hecho) intentó suicidarse… Curiosamente, lo mejor puede ser la banda sonora, creada por Elmer Bernstein en una época en la que sus simpatías izquierdistas le desbancaron temporalmente de Hollywood aceptando trabajar en películas menores del cine independiente.
¿QUÉ MENSAJE NOS DEJA?
Aunque podría pensarse que “Robot Monster” no tiene ningún mensaje, en realidad se puede inferir algo. En el fondo, la historia nos muestra la lucha interna entre el deber y el deseo, aunque de forma burda. A su manera, “Ro-Man” representa la incapacidad de las máquinas de comprender la humanidad, una reflexión que, aunque básica, se adelantó a temas que posteriormente abordarían películas de mayor profundidad.
Por otro lado, el personaje de Alice muestra cómo la humanidad y la empatía pueden convertirse en una debilidad o en una fortaleza, dependiendo del contexto. Al final, es la conexión humana la que vence al alienígena.
EPÍLOGO
Todo lo que hemos visto, este viaje entre lo absurdo y lo fantasioso, se revela finalmente como el sueño de un niño. Johnny, al despertar, se encuentra con que todo ha sido una invención de su imaginación. Pero la ambigüedad final de la película, con “Ro-Man” apareciendo de nuevo en la cueva, deja abierta la posibilidad de que la amenaza no esté completamente extinguida. Este desenlace surrealista cierra con una nota irónica, recordándonos que las inconsistencias, la ridiculez y el caos no eran errores, sino la representación del mundo fantasioso de un niño.
Mi Clasificación para “Robot Monster” es un: 5, PELADO Investiga
“Robot Monster” es una película que, a pesar de sus innumerables errores, ha dejado una huella imborrable en la cultura pop y en el cine de ciencia ficción. Convirtiéndose en un clásico de “tan mala que es buena”, esta obra sigue siendo mencionada, parodiada, y referenciada hasta hoy. Quizás, el secreto de su éxito radica en esa mezcla de ingenuidad y ambición desmedida que solo el cine más audaz de la década de 1950 podía ofrecer.
“Robot Monster” con un presupuesto de solo 16 mil dólares y rodaje en cuatro días, logró recaudar un millón en taquilla, haciendo historia por razones que van desde su atrevida simplicidad hasta su total falta de lógica.
→ Fecha Estreno: 25/06/1953
→ Título: Robot Monster
→ Duración: 66 minutos
→ País: Estados Unidos
→ Dirección: Phil Tucker
El PELADO Investiga